domingo, 2 de marzo de 2014

Nuevos objetivos, nuevas zancadas.

Una semana después de la maratón, llega el momento de pensar en nuevos objetivos, retomar entrenamientos y analizar todo lo vivido en los últimos meses.

No soy un experto ni he vivido maratones anteriores, pero creo que lo de esta semana debe corresponderse con algún tipo de síndrome post-maratón. No he tenido mucho espíritu para salir a entrenar y ni siquiera me lo he planteado. Cierto es que hubiera necesitado dar algún paseo alguna que otra tarde, pero si hubo alguna opción, el trabajo no me lo permitió. 

De todas formas, y con todo el fin de semana ocioso, tampoco lo he hecho. Pero parece que justo una semana después el reloj se activa, y toda la maquinaria se pone en marcha.

Lo primero que quería era marcarme un objetivo de aquí a final de año. Teniendo en cuenta cómo he asimilado los entrenamientos y cómo discurrió la Maratón de Sevilla, creo que estoy en condiciones de plantearme cerrar el año con un Maratón interesante y rebajar mi actual, primera y única marca hasta ahora, las 3H27’. Para ello llevaba algún tiempo barajando algunas pruebas interesantes a final de año, como la Maratón Nocturna de Bilbao (18/10/2014), pero que tendrá que ser otro año.

He decido preparar la Maratón de Valencia, que será el próximo 16 de Noviembre. Me parece una de las pruebas más interesantes del circuito, muy rápida también. 
La época es perfecta, y la temperatura es ideal. Además, lo tengo muy cerca. He leído mucho y bueno sobre esta Maratón, multitudinaria también, y que el entorno de la Ciudad de las Artes y las Ciencias le otorgan un atractivo especial.

Como objetivo más próximo, me he inscrito al Circuito de Carreras #Sevilla10, que comenzará el 30 de Marzo con la Carrera Popular Nervión San Pablo, y que irán sirviendo de cara a seguir progresando y conseguir nuevas marcas.

En los próximos días pretendo definir las pautas de entrenamiento a seguir. La intención es ir ganando velocidad, ir forzando un poco la máquina e ir viendo la progresión posible. Mi cuerpo ya sabe de qué va la cosa, y hasta ahora me va respetando. Pretendo seguir respetándolo yo a él para que todo funcione como debe hacerlo.

Así que volvemos a la carga. Escribiremos nuevas páginas en esta pequeña historia.


Y recuerda, cada zancada cuenta!!

Crónica Maratón Sevilla 2014.


Jornada fantástica desde principio a fin.

Nos levantamos muy temprano para nuestro ya tradicional desayuno de equipo, donde nos vamos metiendo en ambiente con los nervios propios de una prueba de este nivel. Había "ansia viva" por llegar a La Cartuja y vestirnos "de corto", afrontando así la recta final hacia la salida. 

Nos dormimos un poco en los laureles y llegamos a la zona sobre 7:50, con lo cual tuvimos que sufrir cierto atasco para acceder al parking del estadio. En seguida nos preparamos y nos dirigimos hacia Carlos III para colocarnos en línea de salida. Bonito encuentro con mi amigo Jose Antonio Oliva Martín.


Salimos!!!!! El día era fantástico, solazo sevillano para la ocasión y arrancamos dirección Ronda Triana con la ilusión por bandera y con la energía que las jornadas de descanso y la preparación te otorgan. Recuerdo que finalizando Carlos III, una vez se acabaron los árboles y pabellones de la izquierda, el sol nos abrazaba para terminar de calentar nuestros motores, para que ya no pudiéramos albergar ninguna duda de que el show comenzaba. Esos primeros metros me esforcé en alcanzar el globo de las 3H30', porque en eso radicaba mi estrategia, no soltar este globo. 

Los primeros kilómetros, aunque diría que hasta la media maratón, no me supuso ningún esfuerzo. Iba disfrutando como un enano. La sensación de ser arrastrado por una marea de corredores, una ciudad volcada con los corredores, un día excelso para la práctica del deporte, mi cuerpo respondiendo, todo iba sobre ruedas. Dejé atrás a mis compañeros nada más salir, y finalizando Torneo decido dejar el globo. Su ritmo irregular, la concentración de corredores a su alrededor, que parecieran que querían coger la guita del globo, los frecuentes tirones y bajadas de ritmo me hicieron confiar en mi Garmin, que iba perfectamente guiándome en mi empeño. Así que al liberarme del globo, alegré un poco mi ritmo y rondé los 4'50'' por kilómetro hasta bien pasados los 30 Km. 
Entonces estábamos en Manuel Siurot y comenzaba la maratón. A esa altura me quedo sin referencia del Garmin, que no tenía mejor momento para saturar la memoria (por eso veréis reflejado tiempos sólo hasta el kilómetro 30 aprox). Ver a mis hijas en las inmediaciones del Benito Villamarín me hizo venirme arriba, y el paseo de la palmera lo afronté reorganizando mi estrategia psicológica, que comenzaba a derrumbarse. La entrada en el parque María Luisa ya resultó bastante dura, pero el marco incomparable de la Plaza de España entretuvo mi agonía, que por un momento, me permitía respirar. Igualmente, y aunque ya me encontraba bastante exhausto, entrábamos en una fase donde el clamor del público resultaba fundamental para afrontar el momento. Avenida San Fernando, Avenida de la Constitución, Plaza Nueva.....Impresionante, pasar bajo la Catedral de Sevilla, el público, el ambiente.....

Pero hasta ahí. A partir de aquí mi cuerpo acusó el esfuerzo, y tuve irremediablemente que reducir mi ritmo. Gracias al superávit de ritmo que había desarrollado en los 2 primeros tercios de la carrera, finalmente me permitió cubrir mi objetivo. A partir de la barqueta pareciera que subía Alpe D'huez o el Tourmalet. Esfuerzo sobrehumano ya para llegar al estadio, atravesando el Parque del Alamillo y encarando la entrada a la Gloria. 

Y ya estábamos ahí. Impresionante sensación bajar por el tunel y encontrarte dentro del Estadio Olímpico de La Cartuja. Afrontar esos últimos metros ante el público congregado en sus gradas y pellizcarte al ver el tiempo en el marcador. No puedes evitar gritar, cerrar el puño. levantarlo y gritar que sí, que has llegado a la meta, que aquello que te propusiste hace unos meses como algo que rozaba la locura, ahora lo tienes delante de tí, a escasos metros. Atrás han quedado 42 kilómetros de alegría, felicidad, fatiga y sufrimiento. Han quedado meses de carreras en soledad, bajo el negro de la noche, el agua y el frío levantino, el sacrificio por entrenar y más entrenar. Y ahora no quería llegar, quería disfrutar ese momento. Todo se centraba en visualizar esa foto, una recta, una meta al fondo y mis piernas llevándome al objetivo.

Quiero hacer mención especial al equipo que un día me permitió disfrutar de esta bendita locura, y por la que sin darme cuenta, hoy disfruto de mi mayor afición. El equipo del ClubAtletismo Lorenzo Mercadante, un equipo humano sin parangón. Abrazar principalmente a los compis que no han podido disfrutar de esta maratón por problemas físicos, Antonio González Macías y Alfonso Sánchez-Palencia, a los que les deseo una pronta recuperación y envío mucho ánimo. A los que no estuvieron por otros motivos, Antonio Jesus Macias Martin. A los gladiadores que forjaron su camino a base de zancadas, Jesús Romero GutierrezMano Bus Mano,Alejandro Alvarez Soto e isidoro. Al pretoriano Andres Martos Aranda, que superaba un bajón físico y luchó por terminar, y a otros tantos como mi primo Jose Manuel Espinar, Nacho Garcia-Filoso AlijoRafa CastroGustavo Jaramillo Silva, todos ellos héroes y espejos en los que me miro, para seguir creciendo y mejorando.



Enhorabuena a todos y gracias por, de una forma u otra, permitirme disfrutar de este embolao. Nos vemos pronto en nuevos fregaos.